De La Gran Piñata

Réquiem
La mañana es una doña muy puta que anda siempre disfrazada de ojera; me trae la resaca a la cama cada noche que no duermo con vos. Me cuentan los palos borrachos y, algún borracho del palo, que ya no parás un segundo ni para saludar. Y para colmo de males, el mundo ya no me hace gracia desde que tu Victorinox se olvidó de mi nombre. Viejos sabores, mansos antojos, lungos dolores, siempre a estrenar. Ahí viene la noche a fruncirme los hombros de nuevo, me importa tres huevos si no le caigo bien a Dios. Habrá que brindar otra vez con la copa vacía, la mala suerte esta vez te la dedico a vos. Acordate de cuando juramos contarnos las arrugas, acordate de cuando no nos importaba nada. Y vos decidiste llorar por un hijo de puta en vez de reírte conmigo, mirando una tele apagada. Viejos sabores, lungos antojos, mansos dolores, siempre a estrenar. From Letras Mania